En la actualidad y después del confinamiento por la pandemia, la cercanía y acceso a redes sociales aumentó considerablemente y la edad en que tenemos acceso a redes sociales y dispositivos móviles cada vez es menor, según el INEGI, 12 millones de niñas y niños en México están presentes en alguna red social, lo cual representa diversos riesgos ya que se están enfrentando a un entorno virtual que conlleva contacto con otras personas y consecuencias en su seguridad y bienestar, uno de los riesgos más importantes es el llamado Grooming, este término se refiere a el contacto de un adulto con un menor haciendo uso de la manipulación y el engaño con el objetivo de involucrarse de manera afectiva y/o sexual.
Estos acosadores generan perfiles falsos o engañan a los niños para acercarse a ellos, posteriormente se ganan su confianza, los aíslan de su entorno, amigos y familia y posteriormente inician conversaciones con contenido sexual o explícito, muchas veces incitando a establecer una relación sexoafectiva y compartir contenido íntimo.
Estos actos pueden tener incontables consecuencias negativas en la vida de los menores, es por esto que es necesario acompañarlos en su acercamiento a este entorno virtual, orientarlos y prevenirlos. Una de las formas de hacerlo es hablando del tema, esto puede ser retador y confuso por no saber en qué momento o cómo abordarlo, aquí hay algunos tips para generar un diálogo y acercamiento sobre el grooming con tus hijos:
- Infórmate y mantente en constante actualización. Lo primero es conocer los entornos digitales, redes sociales, hábitos tecnológicos que tienen tus hijos, conocer cómo funcionan las aplicaciones, qué sentido tienen, de esta manera saber aconsejar y orientar sobre su uso.
- Genera un lazo de apertura y confianza. Antes de generar un diálogo es importante que exista una relación de confianza para poder escuchar ambas partes, es por eso que debes reiterarle a tu hijo que puede confiar en ti y demostrarle que respetas lo que te cuenta.
- Comienza haciendo preguntas. Inicia interesándote por los temas y aplicaciones que utiliza, pregúntale con curiosidad cómo funciona y qué es lo que más le gusta de ellas.
- Habla en un entorno de calma y apertura. Aborda el tema en un momento que sea tranquilo y donde ambos puedan tener atención plena.
- Brinda ejemplos. Una vez que el tema de las redes sociales esté en la mesa puedes plantear ejemplos de situaciones peligrosas en internet como hablar con desconocidos y presentar las consecuencias.
- Escucha sus ideas y opiniones. Una vez que mostraste los riesgos, pregunta: ¿Qué opinas? ¿Qué ideas tienes? ¿Qué dudas te surgieron? ¿Qué acciones puedes tomar o evitar para prevenir el grooming? Así podrás validar su opinión y propuestas.
- No prohíbas ni lo regañes. Es importante establecer reglas sin embargo no uses la palabra prohibir ya que tiene un efecto negativo y contrario en los niños y jóvenes. De igual manera, regañar puede provocar una ruptura en la comunicación y confianza entre padres e hijos, por el contrario, explicar de manera consciente impulsa un pensamiento crítico en tus hijos, lo cual los alejará de los acosadores virtuales.
Aunado a estos importantes diálogos existen otras acciones que puedes realizar para evitar el grooming, como:
- Educar e informar en relaciones afectivas y sexualidad.
- Configurar los dispositivos, páginas web y redes sociales para bloquear ciertos contenidos.
- Establecer horarios y momentos para el uso de redes sociales.
Estas últimas acciones pueden ser un plus al momento de evitar el grooming sin embargo el arma más fuerte que tienes es informar y dialogar con tus hijos para que sepan cómo actuar en ciertas situaciones, las consecuencias que conlleva, saber reconocer los riesgos, es decir ayudarlos a ser pensadores críticos y fortalecer la confianza y comunicación para que se acerquen a ti en caso de tener alguna duda o situación peligrosa. Toma en cuenta que el grooming es una realidad que cada vez es más frecuente y tiene graves consecuencias, es importante proteger a los niños y jóvenes, un diálogo podría hacer la diferencia.
Fuente: Save The Children